La Municipalidad de Frutillar presentó ante la Comisión de Infraestructura del Consejo Regional (CORE) el anteproyecto para el mejoramiento de Playa Winkler, una zona ubicada en el sector sur de la ciudad, a aproximadamente 600 metros del acceso al camino a Llanquihue. Esta intervención, de gran envergadura, busca consolidar un espacio público moderno, accesible y con mayor equipamiento urbano, con una inversión proyectada cercana a los $6 mil millones de pesos.
Según lo expuesto por el alcalde de Frutillar, Javier Arismendi , y respaldado por el consejero regional por la provincia de Llanquihue, Rodrigo Arismendi, quien preside la Comisión de Infraestructura, este anteproyecto tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los vecinos y vecinas, descongestionar el borde costero y potenciar el turismo local.
Características del proyecto
La intervención contempla una extensión de 250 metros lineales en Playa Winkler, y está diseñada para resolver algunos de los problemas más críticos que enfrenta el sector, como la alta congestión vehicular y la escasez de estacionamientos, especialmente en los meses de mayor afluencia turística.
Entre los elementos que contempla la propuesta, destacan:
- Muelles flotantes con pilotes diseñados para resistir condiciones climáticas adversas y evitar actos de vandalismo.
- Paseo peatonal en el borde del lago, con iluminación, áreas verdes, jardines con jardineras, bancas y otros elementos de equipamiento urbano.
- Zonas inclusivas, con accesibilidad universal, rampas para personas con discapacidad y conexión segura a las distintas áreas del proyecto.
- Rampa para embarcaciones menores, facilitando la navegación y el uso recreativo del lago.
- Juegos infantiles y espacios de contemplación, que fomentarán el encuentro familiar y comunitario.
Conectividad y visión a futuro
Uno de los objetivos estratégicos es lograr una conexión peatonal continua desde la calle Lautaro, lo que implicaría la construcción de una estructura en rampa para superar el desnivel entre el área urbana y la playa. Esta obra permitiría facilitar el tránsito peatonal y vehicular en un punto que hoy genera dificultades para residentes y visitantes.
Durante la sesión con el CORE, el consejero Rodrigo Arismendi detalló que el diseño también busca reorganizar el espacio público, eliminando estructuras antiguas y deterioradas como los muelles actuales, que no cumplen condiciones mínimas de seguridad ni funcionalidad.
El proyecto también incluye la eliminación de ciertos muelles existentes, que no son parte del sistema municipal, pero que actualmente ocupan parte del borde costero. En su lugar, se construirán nuevas estructuras, mejor equipadas y más seguras.
Apoyo técnico y etapas futuras
El diseño será trabajado con apoyo técnico de la Dirección de Obras Portuarias (DOP), dependiente del Ministerio de Obras Públicas (MOP), quienes ya manifestaron su disposición para colaborar en la elaboración de un diseño definitivo y actuar como unidad técnica ejecutora, una vez que se obtenga el financiamiento.
El edil Javier Arismendi aclaró que este proyecto forma parte de una estrategia mayor de renovación urbana, y que Playa Winkler es vista como una “primera etapa” para extender el mejoramiento hacia otros sectores del borde costero frutillarino, incluyendo eventualmente la costanera central de la ciudad.
Próximos pasos
De acuerdo con lo señalado por las autoridades, el anteproyecto será ingresado formalmente a la cartera presupuestaria regional en 2027, año en el cual se podría postular al financiamiento necesario. Si se cumplen los plazos previstos, la ejecución del proyecto podría iniciar en 2027 o 2028, dependiendo de la disponibilidad presupuestaria.
Desde el CORE y la Municipalidad se reiteró la importancia de contar con una infraestructura moderna, accesible y sustentable, que permita descongestionar el centro urbano durante el verano y que, al mismo tiempo, se convierta en un nuevo espacio de recreación, turismo y encuentro ciudadano.

